Lucas 16,1-8 : Tratándose de sus propios negocios, los que pertenecen al mundo son más listos que los que pertenecen a la luz
Jesús contó también esto a sus discípulos: – Un hombre rico tenía un administrador que fue acusado de malversación de bienes. El amo le llamó y le dijo: -˜¿Qué es eso que me dicen de ti? Dame cuenta de tu trabajo porque no puedes seguir siendo mi administrador.-™ El administrador se puso a pensar: -˜¿Qué haré ahora que el amo me deja sin empleo? No tengo fuerzas para cavar la tierra, y me da vergüenza pedir limosna… Ah, ya sé qué hacer para que haya quienes me reciban en sus casas cuando me quede sin trabajo.-™ Llamó entonces uno por uno a los que tenían alguna deuda con el amo, y preguntó al primero: -˜¿Cuánto debes a mi amo?-™ Le contestó: -˜Cien barriles de aceite.-™ El administrador le dijo: -˜Aquí está tu recibo. Siéntate en seguida y apunta sólo cincuenta.-™ Después preguntó a otro: – Y tú, ¿cuánto le debes?-™ Éste le contestó: -˜Cien medidas de trigo.-™ Le dijo: -˜Aquí está tu recibo. Apunta sólo ochenta.-™ El amo reconoció que aquel administrador deshonesto había actuado con astucia. Y es que, tratándose de sus propios negocios, los que pertenecen al mundo son más listos que los que pertenecen a la luz.-
